El empeoramiento de la memoria, del razonamiento y del pensamiento son procesos asociados a la edad que pueden terminar o no en un proceso neurodegenerativo como la demencia senil o la enfermedad de Alzheimer.
Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), con el término demenciase hace referencia a un conjunto de enfermedades con deterioro de la capacidad para procesar el pensamiento, más allá de lo que podría considerarse consecuencia del envejecimiento normal.
La demencia afecta a: la memoria, el pensamiento, la orientación, la comprensión, el cálculo, la capacidad de aprendizaje, el lenguaje y el juicio. El deterioro de estas funciones conlleva una pérdida progresiva de la autonomía del enfermo.
Los casos de demencia se incrementan de forma exponencial con la edad, siendo previsible una auténtica epidemia a nivel mundial en los próximos años.